Esta crónica no comienza el 9 de Mayo de 2015, comienza justo un año antes. Cuando yo andaba por mis primeros entrenamientos y no vislumbraba aun ni acabar mi primera carrera.
Mi sueño desde hace muchos años era disputar y acabar los 101KM de la Legión, pero como nunca me había visto capaz hasta el año pasado, no había planteado tal reto.
He estado toda la temporada preparando carreras y entrenos con vistas a llegar preparado para terminarla, y aquí estamos…. 1 semana antes empieza a sentirse por Ronda el ambiente festivo de la prueba, ves los primeros camiones montando en la Alameda, las balizas por el campo…. Y yo empiezo literalmente a estar CAGADO.
He hablado mucho durante toda la temporada con Mr M, Mr Lizard y Mr Law, de lo que tiene esta prueba que aun sin haberla disputado ya engancha, total al lio que como siga haciendo introducción esto no acaba nunca.
El viernes previo a la prueba me reúno con toda la manada de Bichos enunciada antes más Mrs Little, que desde fuera ya se marcó un carreron por nosotros para animarnos.
Pasamos la tarde y vemos el ambiente previo en la Cena de la Pasta, nos echamos un buen rato de risas y pronto a dormir. Evidentemente no duermo un carajo en toda la noche de los nervios e incertidumbre.
Me levanto a las 7 y voy a desayunar que he quedado con mi Primo Javi (el culpable positivo de meterme en estos embolados) y sorprendentemente estoy mucho más tranquilo que el día previo.
Desayuno rápido y nos vamos para el campo de futbol con mi primo y sus amigos a ver si pillamos un sitio decente para salida. El ambiente en el campo es espectacular, y me preocupa el solano que está pegando tan temprano. Ultimas risas, abrazos y… !Pistoletazo de salida!
Empiezo a un ritmo realmente bueno para la exigencia de la prueba, y voy tirando solo los primeros 30km, hasta que me encuentro a los amigos de mi primo Juanlu y Sita y ya empezamos a tirar juntos todo el sector de bici.
A mi paso por Setenil me encuentro a papa y mama esperando para animarme y verme lo que me da un subidón tremendo, porque a partir de aquí empieza lo realmente duro.
Llego a la transición de bici en el Km 76 y me encuentro cansado de patas, pero de cuerpo estupendo que es lo que peor creía que iba a estar. En la puerta está esperándome mi familia y estos dos compis que a la postre serian mi gran aliento en carrera.
Comenzamos la parte a pie con un calor del copón y temiéndole a la famosa Ermita de Montejaque, hacemos todo el sector a pie porque Juanlu va regular de piernas y no puede correr, y como mi objetivo era llegar a meta seguimos juntos los 3 hasta la meta.
Así que con paciencia y risas íbamos sumando kilómetros, y teniendo en mí mente presente a todos los que me escribían y se acordaban de mí en carrera.
Nos plantamos en la última transición, que eran 5km hasta meta en bici, y ya veo el ladrillo cerca. Llegar a Ronda anocheciendo y ver la hilera de frontales subiendo hasta meta es un autentico pasote.
Al llegar a meta me encuentro a toda mi familia esperando nuestra llegada y dándonos el último achuchón. Cruzo la meta de mi ansiada Alameda que tanto tiempo atrás me había imaginado y en mi mente hasta meta solo me venían retazos de toda la temporada, de los días buenos entrenando, de los malos…. Y una frase que a mí me ha marcado personalmente:
LO CONSIGUIO PORQUE NO SABIA QUE ERA IMPOSIBLE.
Hasta aquí va mi historia de la Edición XVIII de los 101KM.
Esta crónica va para todos aquellos que me han apoyado incondicionalmente, me gustaría nombraros a todos pero me faltarían líneas por el gran grupo de personas que tengo a mi alrededor, a mis compis Bichunos de carrera Mr M y Mr Lizard y en especial para Mr Law que el 50% de mi ladrillo es suyo por haber luchado tanto y tener que retirarse.
Y una vez más, la montaña no pudo conmigo, se convirtió en mi mejor aliado…
Mr Mountain